La fórmula preferida del profesor
(博士の愛した数式)
Título original: Hakase no aishita sûshiki
Año: 2006
Duración: 100 min.
País: Japón
Director: Takashi Koizumi
Guión: Takashi Koizumi. Basada en la novela 博士の愛した数式 de Yoko Ogawa
Productores: Miyako Araki, Tsutomu Sakurai y Tamotsu Shiina
Protagonistas: Akira Terao, Eri Fukatsu, Takanari Saito, Hidetaka Yoshioka, Ruriko Asaoka y Hisashi Igawa
La película nos muestra una gran historia sobre cómo no relacionamos
con las personas que nos enseñan y cómo esa relación es la que permite abrirnos
al conocimiento; vemos cómo un profesor a pesar de todas las deficiencias que
tiene logra trasmitirle a un pequeño niño su amor por el mundo; cómo las
matemáticas son un vehículo para aprehender el mundo totalmente y también a las
personas.
Comienza con un
profesor, muy joven, que se enfrenta a su clase el primer día del ciclo. Este
día es crucial para los que nos dedicamos a esto, lo sabemos bien quienes nos
plantamos frente a un grupo de adolescentes que no conocemos el primer día de
clases. Este profesor, como nosotros, no puede llegar al salón y hablar de
matemáticas, aunque ese sea el propósito final de la sesión. No, tiene que
atrapar primero la atención de quien lo escucha para, al final, atrapar y
envolver al escucha con la manera en la que vemos el mundo, con la manera en
que lo apreciamos. Lo que enseñamos todos es eso, una forma de ver el mundo al
que nos enfrentamos todos.
Poco a poco vemos como
el saber se vuelve el centro del
discurso del joven docente frente a su grupo. ¿Por qué? ¿Cómo? Primero observamos
cómo las matemáticas son importantes para quien las imparte, cómo las
matemáticas llegaron a su vida y cómo las matemáticas lo marcaron de tal manera
que encausaron su vida.
Todos aprendemos con
ejemplos y el que vemos no tiene que ver con ecuaciones, sino con la memoria,
las ecuaciones vienen después porque siempre están presentes. De esta manera
debemos hablarles a nuestros alumnos, debemos transmitir la importancia del saber más allá de los libros, más allá
de la escuela misma.
El saber hacer se presenta
cuando es necesario, no como el objetivo en sí, sino como una herramienta
importante para entender lo que queremos decir. En la película el profesor nos
da muchos datos, mucha información que no nos pesa. No, no es así. La
necesitamos porque es importante para poder entender el relato que nos está
contando. Nombres de matemáticos, nombres de otros hombres que, como nosotros
ahora, se interesaron por las matemáticas para conocer el mundo. Aprendemos de
números, de ecuaciones, de secuencias, etc.
Pero las matemáticas no sólo son datos duros. El saber ser, elemento integrante de una educación completa, también
se hace presente. La formación que presenciamos incluye una clase sobre las
personas y cómo ayudar a los demás con lo que tenemos desde nuestro trabajo, no
importa cuál sea. En la película vemos que no sólo los profesores enseñan y no
sólo los niños aprenden y se transforman. En la película todos los personajes
sufren un cambio, no son los mismos: todos aprendieron de los demás. No sienten
igual. Estos valores y muchos más forman una parte importante de este trabajo
tan noble que ejercemos todos en algún momento: la docencia.